Terremotos, también conocido como sismos, son temblores que se producen en la superficie terrestre. Este fenómeno natural puede ser desencadenado por factores como la actividad volcánica, fallas geológicas y, sobre todo por el encuentro de diferentes placas tectónicas.
De acuerdo con la teoría de la deriva continental, la corteza terrestre es una capa de roca fragmentada, es decir, que se compone de varios bloques, llamados placas tectónicas. Estos enormes bloques están en constante movimiento y pueden alejarse (zona de divergencia) o aproximarse (que resulta en una zona de convergencia).
En las zonas de convergencia puede ocurrir un choque entre placas o la subducción de las placas tectónicas (una placa más gruesa recae sobre una placa menos densa). Estos hechos producen una acumulación de presión y flujo de la energía, que se propaga en forma de ondas sísmicas lo que caracteriza el terremoto.
El lugar donde se realiza una reunión entre las placas tectónicas se denomina hipocentro (interior de la Tierra) y el epicentro es el punto de la superficie sobre el hipocentro. Las consecuencias se pueden a sentir kilómetros de distancia, dependiendo de la proximidad de la superficie en la que se produce la colisión (hipocentro) y la magnitud del terremoto, medido generalmente por la escala de Richter.
La magnitud es la cantidad de energía liberada en el foco del terremoto, medida a partir de una escala llamada la escala de Richter. La intensidad es la consecuencia producida por la acción del terremoto, la destrucción causada por este fenómeno. La mayor escala utilizada para clasificar la intensidad es la de Mercalli.
Entre los efectos de un terremoto de gran magnitud en zonas densamente pobladas se dan la destrucción de la infraestructura (calles, carreteras, puentes, casas..) así como la muerte de personas y animales. Los terremotos en los océanos pueden causar la formación de olas gigantes (tsunamis). Estas ondas pueden llegar a las zonas continentales, causando una gran destrucción.
Miles de terremotos se producen a diario en el mundo. Sin embargo, la mayoría de ellos son de baja intensidad y tienen muy profundo su hipocentro, por lo que los terremotos son poco conocidos en la superficie. Japón, situado en una zona muy sísmica se ve afectado por cientos de terremotos por día.
Los lugares más afectados por los terremotos territorios se encuentran en zonas de convergencia de placas, en particular, los países situados en el borde de las placas tectónicas. Entre las naciones que están en esta situación se pueden destacar Japón, Indonesia, India, Filipinas, Papúa Nueva Guinea, Turquía, Estados Unidos, Haití, Chile, entre otros.
