El walkman, un magnetófono portátil, es un invento que Sony lanzó en el verano de 1979.
Existen dos versiones sobre la invención del walkman. Uno de ellos informa que fue Akio Morita, mítico fundador de Sony, quien pidió a los ingenieros de esta empresa para crear un sistema de miniatura para escuchar música.
La otra versión, y según la biografía de Akio Morita, establece que el walkman ha surgido como consecuencia de un divertido hecho: Masaru Ibuka, otro de los fundadores de Sony, visitaba regularmente los laboratorios de investigación de la empresa japonesa. En una de sus visitas, se mostró insatisfecho por no poder llevar sus músicas favoritas en los viajes de avión para romper la monotonía. Esta incomodidad despertó la atención de Shizuo Takashino, un ingeniero de la empresa. Utilizando uno de los grabadores de reportaje de la firma, le retiró los mecanismos de grabación y altavoz, colocando en el espacio vacío un amplificador estereofónico. A esto unió dos auriculares ligeros y revestidos por dos piezas de esponja.
Este pequeño dispositivo había implementado una verdadera revolución. Los consumidores tuvieron que posicionarse mejor frente a la nueva tecnología y, además, este invento hizo surgir un cierto concepto de individualidad. En realidad este objeto que transmite sonidos también constituyó una barrera al sonido, en este caso la comunicación, porque quienes lo utilizan normalmente no desean ser interrumpidos, mientras escuchan solitariamente su música. De hecho, Akio Morita, aún en su biografía, no tuvo problemas en revelar que Sony tenía dudas sobre el lanzamiento del walkman, precisamente porque es un aparato que podría dar una imagen de egoísmo.
Siendo así, el primer modelo tenía dos entradas y un botón naranja que permitían que el sonido llegase a un segundo oyente.
En los Estados Unidos, este nuevo instrumento, modelo TPS-L2, fue lanzado bajo el nombre de Soundbout, pero rápidamente se hizo conocido con el nombre de walkman, un nombre que fue patentado por la empresa.
El dispositivo que marcó el comienzo de la era de la electrónica personal se reveló desde pronto como un éxito desde sus inicios en ventas, incluso sin la inclusión del botón naranja en los otros aparatos producidos.
De hecho, el crecimiento de las ventas refleja, durante décadas, el éxito de la economía japonesa, con el indudable atractivo a la miniaturización de los componentes. El precio del walkman también llegó a reducirse drásticamente en los sucesivos años volviéndose accesible a un mayor número de personas. Aún hoy en día, el aparato continúa siendo asociado con Sony, siendo tal vez su producto más popular.
