Los terremotos o temblores ocupan un lugar destacado entre los principales fenómenos, con potencial de causar mucho daño al hombre y la naturaleza. Así, este desastre ha costado la vida de miles de millones de personas en todo el mundo a través de la historia.
Frente a este problema un tanto impredecible, la humanidad se ha comprometido en las próximas décadas a promover el desarrollo de estudios e investigación dirigidas a conocer y comprender este desastre natural, los terremotos.Los estudios han evolucionado en la medida en que la ciencia y la tecnología avanzada lo han permitido, por lo que, en los centros contemporáneos se responsabilizan de observar el conjunto particular de las placas litosféricas y otros elementos que provocan este fenómeno y a generar datos preliminares, con el objetivo de difundirlos a tiempo.
Teniendo en cuenta que algunos lugares tienen una mayor posibilidad de ocurrencia de terremotos, el hombre a través de su entendimiento ha creado estructuras en la construcción (edificios, casas) adaptadas a la incidencia de los terremotos.
Debido a la monitorización en diferentes partes del mundo se logra disminución gradual de la tasa de víctimas y esto indica que las tragedias que ocurrieron en el pasado se pueden evitar, porque la sociedad está más preparada para este evento natural.
El tsunami que se produjo en Asia produjo una cifra elevada de muertos sólo porque no ha habido una predicción debido a que el Océano Índico, en el momento del evento, no tenía equipo para identificar los temblores bajo el agua.