La Revolución Industrial se produjo en Europa (especialmente en Inglaterra) en el siglo XVIII, y sirvió para cambiar radicalmente la estructura de la sociedad. Los hombres comenzaron a ser reemplazados por las máquinas, que producen más y cuestan mucho menos.
Esto causó problemas sociales que se aumentaron, porque mucha gente que trabajó previamente con la mano, se encontraban ahora desempleados. Ellos estaban acostumbrados a una forma más lenta de la vida en las zonas rurales y trabajaban sólo para sobrevivir en la tierra. Ahora sería más trabajo para los hombres de negocios que ganaban más y gastaban menos al dispensar de mano de obra humana.
La sociedad se dividió en burgueses, que eran dueños de las fábricas y controlaba la economía, y el proletariado, que tenía una fuerza de trabajo. El capitalismo se hizo fuerte, quienes producen más estaban por encima de los demás.
Una película que retrata la revolución es la de “Tiempos Modernos” de Charles Chaplin en el año 1936. En ella, Chaplin es un empleado de una gran fábrica en Europa, y termina tan alienado por el ritmo de trabajo, que acaba por ser despedido. Entonces, para no morir de hambre, decide robar comida, junto con una niña de la calle. Es arrestado varias veces, incluso al ser confundido con un manifestante en una huelga en la empresa donde trabajaba. La película muestra de manera humorística la situación en la que los trabajadores fueron tratados. Exagerada debido a la comedia, el capitalismo llegó a proporcionar máquinas alimentan automáticamente al funcionario para que él no dejase de producir.