En cama angosta y en luengo camino, no hallaras amigos.
Ya recogido por el marques de Santillana en su obra Refranes que dicen las viejas tras el fuego, y posteriormente citado por Galdos en Narvaez, denota que en las dificultades se conoce a la gente, y que esta, por lo regular, no se da a la amistad en tales circunstancias.