La reforestación es una iniciativa ambiental que pretende repoblar áreas que tenían la vegetación eliminada por las fuerzas de la naturaleza (fuego, por ejemplo) o las acciones humanas (quema intencionada, tala, expansión de áreas agrícolas, construcción civil…).
Arborización
Podemos llamar de reforestación al proceso de siembra de áreas específicas donde no había ninguna vegetación en las últimas décadas. En este proceso, se crean, por la acción humana, pequeños bosques, principalmente con especies leñosas. Este proceso está dirigido principalmente a la creación de zonas de recreo o para mejorar la calidad del aire en las zonas que sufren la contaminación atmosférica o el recalentamiento del aire (Islas de calor).
El uso del eucalipto
Las industrias de madera y celulosa también realizan la reforestación, utilizando principalmente el eucalipto. Esta especie se utiliza por su rápido crecimiento y debido a que la madera tiene buena aceptación comercial.
Otros objetivos
La reforestación también se desarrolla para crear barreras de árboles con el objetivo de proteger ciertas cosechas de la acción provocada por fuertes vientos.
Otro objetivo importante de la reforestación es mejorar el rendimiento de las zonas de captación de agua.
Importancia
El proceso de reforestación es de gran importancia para el medio ambiente. Esta operación es capaz, cuando ejecutada eficazmente, de recuperar áreas verdes con especies nativas, mejorando ecosistemas degradados.
Mediante el proceso de reforestación, muchas compañías dejan de adquirir madera procedente de la tala ilegal, ayudando a prevenir la práctica indiscriminada y dañina sobre la naturaleza.
El proceso de reforestación se aplica también en zonas de laderas para evitar deslizamientos de tierra. En este contexto, también es eficaz en la lucha contra la erosión del suelo.