Siguiendo la idea de la Deriva Continental, corteza terrestre es una capa discontinua de rocas, con varios fragmentos conocidos como placas tectónicas o placas litosféricas. Estas tarjetas forman parte de los continentes y el fondo de los océanos y mares.
Por lo tanto, las placas tectónicas son gigantescos bloques que forman la capa externa de la tierra sólida, o litosfera (corteza del manto más superior). Ellos están en constante movimiento (movimiento en el magma del manto), y pueden alejarse o acercarse unos a otros, estos procesos se clasifican en las siguientes:
- Zonas de divergencia: las placas tectónicas se alejan unas de otras.
- Zonas de convergencia: las placas tectónicas se acercan, siendo presionadas unas contra otras. Este fenómeno se puede hacer por subducción u obducción. Subducción es cuando las placas se mueven una hacia la otra y la placa oceánica (más densa) se introduce sobre la continental (menos densa). En cuanto a obducción o colisión sucede cuando se chocan dos placas en la porción continental. Sucede en virtud de la gran espesura de las secciones en las que están chocando.
Este movimiento de las placas tectónicas altera poco a poco la forma del relieve terrestre, elevando las cordilleras y abriendo abismos marinos Otra consecuencia de este fenómeno (causada por la reunión de las placas) son los terremotos y tsunamis (maremotos). En 2004, en el Océano Índico, un terremoto de magnitud 9,3 en la escala de Richter provocó un tsunami que causó la muerte de más de 230.000 personas.
El movimiento de las placas tectónicas se ha demostrado a través de investigaciones realizadas con satélites artificiales. Se ha detectado, por ejemplo, que América del Sur se aleja de 3 cm por año respecto al continente de África.
Las placas tectónicas principales son: Placa del Pacífico, Placa de Nazca, Placa de América del Sur, Placa Norte-Americana, Placa de África, Placa Antártica, Placa Indo-Australiana, Placa Euroasiática Occidental, Placa Euroasiática Oriental y Placa de las Filipinas.