Hábitat es el ambiente en el que vive una especie (animal o vegetal) o un conjunto de especies. Se define por su vegetación, el clima y las características físicas del entorno (factores abióticos).
El concepto de hábitat se utiliza generalmente en referencia a un entorno restringido geográficamente donde un organismo pueda vivir de manera silvestre.
La destrucción de un hábitat puede conducir a la extinción de especies cuando afecta a una comunidad o población amplia. Este es el caso del oso panda, cuyo hábitat, los bosques de bambú de China, fueron devastados. Por esta razón, algunos pandas son criados fuera de su ambiente natural, como en zoológicos.
El ecosistema específico que sustenta la vida tiene muchas características complejas que deben analizarse siempre de acuerdo con el tipo de vida que existe allí. Esto es válido para todos los ecosistemas y todas las especies.
Un hábitat es simplemente un lugar donde los seres humanos, los animales y las plantas pueden vivir de forma sostenible. Como hoy la degradación del planeta es muy grande, nuestro desafío como seres humanos pasa por desarrollar nuevos hábitats, es decir, construirlos. Planear y monitorizar un hábitat significa mucho más que crear un ecosistema para aves, anfibios y otros animales de vida salvaje. La fabricación de un hábitat artificial (creado por el hombre) representa una vía para promover el desarrollo de una descendencia de determinadas especies amenazadas (especies en peligro de extinción).