En la prehistoria el hombre trató de comunicarse a través de dibujos realizados en paredes de las cuevas. A través de este tipo de representación (pintura rupestre), intercambiaron mensajes, transmitieron mensajes y mostraban deseos y necesidades. Sin embargo, no era un tipo de escritura, pues no existía organización, ni estandarización de las representaciones gráficas desarrolladas.
Creación de la escritura y su historia
Fue solamente en la antigua Mesopotamia que la escritura fue desarrollada y creada. Alrededor del año 4000 a.C., los sumerios desarrollaron la escritura cuneiforme. Usaron placas de arcilla, donde acuñaron esta forma de escritura. Gran parte de lo que hoy conocemos sobre este período de la historia es debido a las placas de arcilla con registros cotidianos, administrativos, políticos y económicos de la civilización.
Los antiguos egipcios también idearon escribir casi al mismo tiempo que los sumerios. Había dos formas de escritura en el antiguo Egipto: la escritura demótica (más simplificada) y la escritura jeroglífica (más compleja y compuesta de dibujos y símbolos). Las paredes internas de las pirámides estaban llenas de textos que se hablaban sobre la vida de los faraones, oraciones y mensajes para disuadir a los ladrones potenciales. Una especie de papel llamado papiro, que fue producido a partir de una planta del mismo nombre, también se utilizó para escribir.
Ya en la antigua Roma, el alfabeto romano tenía sólo letras mayúsculas. Sin embargo, en el momento en que comenzaron a ser escritos en los pergaminos, con ayuda de los tallos de bambú o apenas de patos y otras aves, ocurrió una modificación en su forma original y, posteriormente, se creó un nuevo estilo de escritura llamada uncial. El nuevo estilo se mantuvo hasta el siglo VII, siendo utilizado en la reproducción de biblias hermosamente redactadas.
En la alta edad media, concretamente en el siglo VIII, Alcuin, un monje inglés, produjo otro estilo del alfabeto bajo la solicitud del emperador Carlomagno. Sin embargo, este nuevo estilo también poseía mayúsculas y minúsculas.
Con el tiempo, esta forma de escritura también sufrió modificaciones, volviéndose compleja su lectura. Sin embargo, en el siglo XV, algunos estudiosos italianos, molestos con este estilo complejo, crearon un nuevo estilo de la escritura.
En el año 1522, otro italiano, llamado Ludovico Arrighi, fue responsable de la publicación del primer libro de la caligrafía. Fue el quien originó el estilo que hoy llamamos itálico.
Con el paso del tiempo otros libros fueron impresos también, con sus tipos de grabados en placas de cobre (calcografía). Fue a partir de este proceso que se originó la designación de la escritura calcográfica.
¿Sabía usted?
Hay una ciencia que estudia las escrituras antiguas, sus símbolos y significados. Esta ciencia se llama Paleografía.
