Cuando se trata de chocolate, conocer un poco de su historia y algunos de sus efectos en nuestro organismo resultan entretenidos. Pero lo que para algunos es un placer incontrolable, para otros se convierte en una tentación, principalmente para aquellos que quieren perder peso.
El árbol que da lugar al cacao es Theobroma, cuyo significado original significa bebida de los dioses. Este árbol hermafrodita presenta varios tipos, entre ellos Theobroma angustifolia, Theobroma microcarpus, Theobroma obovatum y Theobroma stipulatum son cultivados de manera industrializada para la producción de cacao. Es nativo de América Central y América del Sur y requiere de condiciones especiales para la producción de este producto. A modo de ejemplo, los árboles productores de cacao son extremadamente sensibles a las variaciones climáticas y principalmente a las enfermedades. Su altura no suele sobrepasar los diez metros y, en caso de que las condiciones resulten favorables, apenas 5 años se inicia su producción, pudiendo vivir hasta casi 50 años. La polinización de las flores del árbol del cacao es realizada por murciélagos.
Chocolate, un néctar tardío
Brasil fue uno de los principales productores de cacao, contribuyendo en la época con más del 30% de la producción mundial. Sin embargo, los problemas relacionados con el costo de la producción local y la falta de organización de los productores de cacao, contribuyeron a la decadencia de este sector productivo, que ahora representa sólo el 4% de la producción mundial.
La historia del cacao es muy antigua, ya que los pueblos precolombinos utilizaban sus semillas para hacer una bebida utilizada en rituales religiosos y algunos empleados como moneda. Cristóbal Colón, en una de sus muchas incursiones en el continente, fue el primer europeo que tuvo conocimiento del chocolate, sin embargo, el éxito de chocolate en Europa no se produjo hasta varios años más tarde. Inicialmente, la bebida era amarga y oleosa, y su sabor no era agradable para el gusto europeo, solamente en sustitución de algunos productos, como la pimienta por el azúcar, por ejemplo, permitiendo así una mayor aceptación de la bebida.
Con la popularidad, otros países europeos empezaron a producir cacao en sus colonias, favoreciendo la disminución de los precios, hasta entonces muy elevados. De esta manera, la bebida que antes era exclusiva de los reyes y personas afortunadas, al poco tiempo se fue popularizando. La sustitución de agua por leche también promovió significativamente para mejorar todavía más el sabor de la bebida. A partir del aumento del consumo y del desarrollo de nuevas y modernas técnicas de producción y procesamiento, el chocolate pasó a ser consumido en forma de tabletas y se transformó en las formas que hoy conocemos.
En cuanto a los efectos del chocolate en nuestro cuerpo, no hay estudios concluyentes sobre las sustancias presentes en este alimento y su reacción en nuestro sistema nervioso, sin embargo, algunas investigaciones ya realizadas desmitificaron la idea de que el chocolate se asocia con la aparición de acné y de inflamaciones cutáneas. Así, el gran problema en relación al consumo del chocolate se refiere al exceso de grasa hidrogenada añadido durante su fabricación, que es perjudicial.
