Wynton Marsalis, músico de jazz estadounidense nacido en 1961 en Nueva Orleans. Criado en una familia de músicos, su padre, Ellis, era un pianista sin gran fama como intérprete, pero ampliamente respetado como profesor en Nueva Orleans. A mediados de los 80, Winton integra la banda de Art Blackey, los Jazz Messengers en 1956. Más tarde, él formó un quinteto con su hermano Brandford con quien se incomodó y expulsó del grupo por haber tocado con Sting. Realizó giras con Herbie Hancock, pero su carrera sigo centrada como compositor e instrumentista, por delante de sus propias formaciones.
Aunque nadie puede negar las extraordinarias habilidades técnicas, ni la notable erudición musical, la controversia alrededor de Wynton Marsalis dividió a las opiniones. Para unos, la gran mayoría, Wynton era señalado como el salvador del jazz, aquel que vino a recuperar la tradición y así renovar un género que marcaba dudosas sendas. Para estos, Wynton Marsalis dio un paso hacia atrás para dar dos hacia el frente. Pero otros lo acusaron de ser un mero plagiador de armonías y estilos, sin traer novedades al género salvo la repetición de lo que ya se podía oír en las grabaciones de músicos de otras generaciones. Aunque talentoso y hábil de técnica, fue llamado de copista.
En buena verdad podemos decir que el tiempo terminó por tomar partido: el fenómeno Marsalis fue responsable de un crecimiento en las ventas de los discos de jazz y atrás de su nombre aparecieron otros en la línea de frente, en un proceso de renovación intenso y sólido, como hacía tiempo no se veía. Más allá del jazz, el trompetista Wynton ostenta una sólida formación clásica. De hecho, asume el cargo de director de jazz en el Lincoln Center de Nueva York, presentando la obra de compositores como Duke Ellington y Thelonious Monk en conciertos formales, equiparando así el trabajo de estos músicos al de los grandes nombres de la música clásica.