Escenas de películas donde hay intercambio de disparos entre la policía y los bandidos pueden traer a la palestra una pregunta: ¿de qué están compuestos los cristales de vehículos blindados y por qué son resistentes a los disparos de un arma?
El vidrio laminado, mejor conocido como a prueba de balas, se ha convertido en una gran ayuda en la lucha contra la delincuencia. Los coches que tienen este accesorio son considerados seguros y se utilizan para el transporte de personajes públicos y figuras de renombre como presidentes, artistas, autoridades religiosas, entre otros.
Sobre la base de la aplicación, el vidrio también recibe el título de vidrio balístico, aquí es mostrado cómo es obtenido industrialmente ese tipo de material:
Una película plástica (altamente resistente) se coloca entre dos piezas de vidrio templado. En la práctica, sería un sándwich donde el plástico sería el relleno y el vidrio las rebanadas de pan.
Cuando un proyectil (bala, piedra o herramienta) toca el vidrio balístico, lo rompe, pero la película impide que se desmorone. Siendo así, sus usos prácticos son múltiples y permiten desde proteger a pasajeros en el interior de un vehículo hasta un local comercial de posibles impactos.
