Vasoconstricción es el proceso que se produce cuando los músculos lisos de las paredes de los vasos sanguíneos se contraen y también está relacionado con el mantenimiento y regulación de la temperatura corporal, evitando que el cuerpo pierda calor para el medio exterior.
El organismo vive en estado parcial de contracción en los vasos sanguíneos, mediado por impulsos. Ese estado es llamado de tono vasomotor, que además controla las actividades del corazón, como contracción y frecuencia cardíaca, incrementando o disminuyendo la actividad del organismo.
El mecanismo de control de la vasoconstricción es procedente del hipotálamo, pues posee efectos excitatorios e inhibitorios sobre el centro vasomotor.
Cuando una persona se expone al frío prolongado, la vasoconstricción puede observarse más claramente en los pies y las manos, por la interrupción del flujo sanguíneo, que es luego liberado por la vasodilatación.
Los vasoconstrictores son sustancias que facilitan la vasoconstricción y son la norepinefrina, la epinefrina, la vasopresina y la angiotensina.