Familia de reptiles, del orden de los saurios, constituida por veinticuatro especies y un solo género, Varanus, que se encuentra en todas las regiones calientes del Viejo Mundo. También están representados en el medio acuático por dos especies especialmente adaptadas a este hábitat. Se trata del varano de los manglares (Varanus semiremex) y del varano-acuático (Varanus mertensi) de los ríos y lagunas del norte de Australia.
Los varanos no son en realidad auténticos lagartos, encontrándose aparentados filogenticamente con las serpientes debido a que tienen lengua bífida. Los miembros de la familia de los varanídeos se caracterizan por sus grandes dimensiones.
Los varanos africanos son saurios con el aspecto de lagartos, con el cuerpo y cabeza delgados y largos, cubiertos de escamas ovales o poligonales. La cola es larga ya veces comprimida lateralmente. La lengua es bífida y retráctil. Los párpados son móviles. Las patas son fuertes y adaptadas a la carrera. Los dedos terminan en garras.
Los varanos africanos pueden alcanzar la longitud de 210 centímetros como es el caso del varano del Nilo o del monitor (Varanus niloticus) y los varanos australianos pueden alcanzar los 4 metros de largo como el dragón de Komodo (Varanus komodensis), que sólo fue estudiado por la vara la primera vez en 1912.
El color varía de especie a especie, así como la relación entre la longitud de la cola y del resto del cuerpo. Son todos predadores, alimentándose en general de animales vivos, pequeños roedores, insectos y huevos. Los varanos australianos se alimentan también de cadáveres de venados, jabalíes, monos, etc. En su mayoría son buenos trepadores.