La Tierra de Oz –descrita en la serie literaria de El mago de Oz– es un lugar mágico, creado por el escritor estadounidense L. Frank Baum, donde se desarrollan las aventuras niña llamada Dorothy Gale, de Kansas, Estados Unidos.
Explorando Oz
Cuando la pequeña Dorothy Gale cae en ese misterioso lugar, se encuentra con criaturas que nunca había visto anteriormente. Y, para empeorar la situación, nadie de allí sabía dónde quedaba Kansas, lugar de origen de la protagonista heroína.
Lejos de cualquier lugar real, Dorothy pronto descubrió que se encontraba en una tierra desconocida por todos, bautizada con el extraño nombre de Oz.
La niña desciende hasta el País de los Munchkins, el nombre de unos seres extraños de pequeño tamaño. El lector del primer libro de la serie (El Maravilloso Mago de Oz) hace un recorrido, junto a la niña, por el camino de baldosas amarillas, rumbo al centro de aquella ignorada tierra, donde se levanta la majestuosa Ciudad Esmeralda.
Más hacia el oeste está la tierra de los Winkies; al norte, el País de los Gillikins; y al sur el Paíus de Quadlings, donde se encuentra en castillo de la Bruja Buena, Glinda.
El gobierno de Oz
Los cuatro países (y la ciudad céntrica de Esmeralda) son cercadas por todos los lados por arenas desérticas, imposibilitando el pasaje hacia fuera así como disuadiendo la entrada de extranjeros allí.
Desde el segundo libro de la serie, L. Frank Baum, el creador de este mundo, introduce nuevos lugares y detalles. Al mismo tiempo, revela la estructura interna del poder y el gobierno de Oz, con el descubrimiento del verdadero heredero al trono de la Ciudad Esmeralda, la Princesa Ozma.
Cada país o región tiene un gobierno: el Hombre de Hojalata se hizo emperador del País Winkies; la bruja Glinda, la buena, rige el sur, pero todos están subordinados al gobierno central de Ozma.
Lugares de interés
En la Tierra de Oz algunos lugares extraños marcan sus países: en el País de Quadlings, por ejemplo, tenemos un bosque de árboles luchadores; la Ciudad de Porcelana está cercada por un muro que evita la entrada de forasteros que puedan romper a sus frágiles moradores; el Muro de los Cabeza Martillo impide la entrada de toda persona ajena al lugar.
En los bosques de este lugar existe un terrible animal: una mezcla entre oso y tigre, responsable de amenazar a aquellos que se aventurasen a penetrar en su interior.
El mundo de Oz
Desde el tercer libro de la serie, Baum amplió los horizontes de Oz, revelando países y tierras que existían más allá de la Tierra de Oz: surge el Reino de Ev, vecino del País de los Gnomos.
En el cuarto libro, el autor presenta una extraña sucesión de mundos subterráneos: el reino de las plantas, la tierra de Fly (con sus osos peligrosos invisibles) y el mundo de Gargoyles (seres hechos de madera).
En varias otras obras surgen otros países, como el Reino IX. Todos estos lugares están situados más allá de los desiertos que rodean Oz –y son a su vez rodeados por el océano de Nonéstica – lo que hace que el mundo de Oz sea similar a una isla-continente.
Otros autores anexan nuevas tierras en las posteriores obras, así como ciudades e islas, por lo que el simple mapa original sólo representa un detalle de un mundo más grande.