Tenis de mesa se originó en la segunda mitad del siglo XIX en Inglaterra, un período en que el deporte tenía varios nombres. Al escuchar el ruido de las bolas golpeando en las raquetas huecas, James Gibb, un corredor de maratón retirado, asoció el ruido a la palabra Ping-Pong, que se volvió el nombre más conocido del deporte hasta nuestros días.
En 1921, los adeptos a esta modalidad decidieron fundar una asociación de tenis de mesa que registrase las reglas oficiales del deporte en el país de Gales, aunque fueron impedidos pues ‘Ping-Pong’ ya era una marca registrada. Así, establecieron la nomenclatura de tenis de mesa y el término Ping-Pong es restringido para fines recreativos. Después de eso, las reglas inglesas fueron aceptadas internacionalmente y el tenis de mesa fue elevado a la condición de deporte olímpico desde el año 1988.
El tenis de mesa es uno de los deportes más populares en el mundo en número de jugadores. Es conocido como el deporte con el tipo de bola más rápida del mundo (superior a los 100 km/h), siendo el deporte de raqueta que produce mayor efecto (rotación) en la bola.
