Taquicardia es una arritmia cardiaca caracterizada por ritmos con frecuencia cardíaca superior a 100 latidos por minuto (lpm). Normalmente, la frecuencia cardíaca varía entre 60 y 80 latidos por minuto, variando en situaciones de reposo o esfuerzo físico.

Las arritmias son alteraciones en la frecuencia cardiaca que, en la mayoría de los casos, se producen de forma inesperada. Pueden ser benignos y no causar síntomas o causar palpitaciones, desmayos y el riesgo de muerte.

La taquicardia auricular puede ser atrial, cuando ocurre en las cámaras cardíacas superiores (atrios), o ventricular, cuando ocurre en las cámaras cardíacas inferiores (ventrículos).

Taquicardia atrial

La taquicardia atrial se caracteriza por la presencia de actividad eléctrica anormal con origen en uno o más focos en el miocardio atrial.

En los adultos, por lo general se asocia con enfermedades del corazón o enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). El tratamiento es individualizado según las enfermedades asociadas.

Taquicardia ventricular

Las taquicardias ventriculares son arritmias que comienzan en los ventrículos y pueden estar relacionadas con histórico de palpitaciones, mareos, dolor en el pecho, dificultad para respirar, desmayos o complicaciones cardíacas más graves.

El tratamiento puede incluir medicamentos, ablación con catéter, desfibrilador o formas asociadas de tratamiento.

Causas de la taquicardia

• Problemas relacionados con el corazón, tales como la hipertensión;
• Miocardio con mala irrigación sanguínea debido a la aterosclerosis, enfermedad de las válvulas del corazón, insuficiencia cardíaca, cardiomiopatía, tumores o infecciones;
• Enfermedad de la tiroides, ciertas enfermedades pulmonares;
• Desequilibrio de electrolitos;
• Abuso de alcohol o drogas;
• Angustia emocional;
• Consumo de grandes cantidades de bebidas con cafeína.

Síntomas de taquicardia

• Falta de aire;
• Mareo;
• Debilidad repentina;
• Palpitaciones;
• Letargia;
• Desmayos.

Factores de riesgo de taquicardia

Algunas condiciones que pueden aumentar el riesgo de taquicardia:

• Enfermedad de la arteria coronaria (aterosclerosis);
• Insuficiencia cardíaca;
• Infarto de miocardio;
• Defectos cardíacos congénitos;
• Disturbios cardíacos inflamatorios o degenerativos;
• Enfermedad pulmonar crónica.