Fue el primer satélite que se lanzaría al espacio en 1957. Este acontecimiento marcó la historia, desde el lanzamiento del Sputnik cogió la atención del mundo por la grandeza de la tecnología presentada. Su tamaño era similar al de una pelota de baloncesto, con un peso de 83,6 kg. Sólo tenía la función de transmitir una señal de radio que podía ser sintonizada por cualquier radioaficionado.
Sputnik estuvo en órbita durante tres meses, pero fue suficiente para ampliar el “horizonte” de la humanidad, que a partir de entonces no tuvo más la Tierra como límite. Muchos consideraron el lanzamiento del Sputnik como una estrategia de marketing por los soviéticos durante la Guerra Fría. Los Estados Unidos comenzaron a invertir en su tecnología espacial que se consideró el primer paso hacia la creación de la NASA (Agencia Espacial Americana del Norte) en un intento por frenar el avance tecnológico de su rival.
Después del Sputnik, la carrera por la conquista y exploración espacial estaba abierta, ya que tanto la Unión Soviética como los Estados Unidos querían dominar el espacio gracias a su tecnología avanzada. Las inversiones en la tecnología espacial fueron grandes y se proporcionaron para nuevas inversiones de aproximadamente 12 mil millones de dólares durante el siguiente año en los EE.UU.
