Poco después de la formación del Estado de Israel, los palestinos comenzaron a sufrir de recurrentes conflictos y tensiones a ese complicado proceso de ocupación territorial. Tras la aprobación de las grandes potencias económicas y la guerra mundial, los israelíes obtuvieron el privilegio para controlar parte del territorio palestino. De esta manera, desde 1949, la región de Palestina se convirtió en un escenario donde las hostilidades y conflictos entre judíos y árabes han sido bastante comunes.
Incapaz de lidiar con el amplio apoyo internacional planteado por el nuevo Estado judío, los palestinos han creado un movimiento que impulsaba la creación de un Estado palestino. El Al-Fatah, tenía entre sus principales articuladores la clase media Palestina que se vio obligada a retirarse de la región debido al clima de intenso conflicto y guerra. El término ‘fatah’ que en árabe se traduce como ‘guerra santa’ o ‘lucha armada’ también hace referencia a las iniciales del Movimiento para la Liberación de Palestina.
Dirigido por Yasser Arafat (1929-2004), la organización militar de Al Fatah ha ampliado su número de afiliados y probó ser una amenaza contra las pretensiones expansionistas de los israelíes. Usando tácticas terroristas, los palestinos cuestionaron la hegemonía judía en la región. Esta conflictiva situación empeoró cuando, en 1966, Siria decidió apoyar a los palestinos. Tratando de reprimir la movilización de los pueblos árabes, las fuerzas aéreas de Israel realizaron un ataque a Jordania en 1967.
Tras el ataque israelí, Egipto puso sus fuerzas armadas listas para el combate. En mayo de ese mismo año, Jordania y Siria establecieron un acuerdo de defensa mutua con el gobierno egipcio. En respuesta, Israel lanzó un ataque sorpresa a las fuerzas egipcias. La táctica sorprendió a los egipcios, que fueron rendidos en menos de una semana. En ese conflicto, la superioridad militar israelí abrumó a las fuerzas jordanas y las tropas sirias. Al final de la guerra, Israel había logrado expandir sus territorios para conquistar la península del Sinaí (repatriada a Egipto en 1982), la franja de Gaza, Cisjordania y los Altos del Golán.