Los residuos se asocian con la actividad humana – son sustancias resultantes de la extracción, el procesamiento y el uso de los recursos naturales, volviéndose perjudiciales para el medio ambiente si no se tratan adecuadamente.

Los distintos residuos se pueden clasificar en: agrícolas, industriales, nucleares, hospitalarios, domésticos (aguas residuales y residuos sólidos) y urbanos.

¿Cuál es el origen de este tipo de residuos?

Agricultura – son el resultado de las actividades agrícolas (cultivos, cría de animales, etc.).

Industria – son originados por las actividades industriales (química, petroquímica, metalurgia, procesamiento de alimentos, producción de pulpa, etc.).

Actividad nuclear – son el resultado de la actividad de las plantas de energía nuclear y hospitales. Por ser altamente radiactivos, son peligrosos y deben almacenarse en recipientes debidamente cerrados y aislados.

Hospitales – se refiere a residuos producidos en hospitales, hogares de ancianos, clínicas, farmacias y laboratorios de análisis. Son peligrosos, ya que pueden ser causantes de la enfermedad si se encontrasen contaminados.

Ciudades – incluye todos los tipos de residuos sólidos producidos por la población y recogidos por los servicios municipales (áreas domiciliarias, zonas comerciales, lugares públicos y sitios de escombros).

Política de residuos

En la Unión Europea esto se basa en la aplicación de una jerarquía de gestión de residuos, donde hay que invertir primero en la reducción de su producción, y cuando esto no es posible, la reutilización y la recuperación y/o el tratamiento de los mismos, siendo su eliminación en vertederos considerada en último lugar, pues no es muy práctica en términos ambientales.

Reciclaje – la producción de nuevos materiales a partir de los materiales utilizados (parte de la política de las 4 Rs – Reducir, Reusar, Reciclar, Recuperar); hay que separar los materiales y colocarlas en puntos ecológicos con señalización de colores para sus diferentes tipos (papel y cartón, embalajes de metal y plástico, vidrio, electrodomésticos, pilas, maderas…). La separación es hecha con mayor rigor en los centros de detección.

Compostaje – el uso de la materia orgánica en la producción del compostaje (abono natural como la tierra); proceso natural que se basa en la descomposición de materia orgánica por descomponedores en la presencia de oxígeno.

Incineración – la quema de desechos, produciéndose energía eléctrica; de la quema resultan gases que son tratados antes de su liberación y materiales sólidos que, después de ser tratados, serán depositados en un vertedero.

Vertedero – la acumulación de residuos de los productos de recolección e incineración no diferenciados bajo condiciones controladas; la infiltración de contaminantes se evita porque el vertedero está impermeabilizado; las aguas de lixiviación se desvían para una planta de tratamiento de aguas residuales, donde serán debidamente tratadas; el gas resultante de la descomposición de los residuos es retirado para que no ocurran posibles explosiones. Son evitadas enfermedades, una vez que, después de una capa de residuos, el vertedero es cubierto con otra capa de tierra.

Almacenamiento subterráneo – residuos altamente tóxicos que no pueden ser destruidos, como es el caso de los residuos nucleares que deben tratarse y mantenerse en lugares de difícil acceso, tales como túneles excavados a varios kilómetros bajo tierra.

Ventajas de la política de residuos

• Reducción de la cantidad de residuos en vertederos;
• Ahorro en materias primas naturales y la preservación de los recursos;
• Reducción de la contaminación del aire, suelo y agua;
• Desventajas de la política de residuos
• Altos costes de recogida y transporte,
• Impacto visual negativo con contenedores llenos y residuos esparcidos en el suelo con olores desagradables.

Aguas residuales

Las aguas residuales de viviendas y espacios comerciales van hacia la red de saneamiento básico para ser tratadas en plantas especializadas, con el fin de ser liberadas más tarde para el medio ambiente sin provocar impactos ambientales. Es importante señalar que el agua resultante de estas plantas de tratamiento de aguas residuales no es potable.

El tratamiento de aguas residuales consiste en tres tipos de procesos:

• Físicos (separación de materiales y partículas tales como palos y arena);
• Biológico (descomposición de la materia orgánica por la acción de las bacterias);
• Químicos (adición de cloro, por ejemplo).

Desarrollo sostenible

El desarrollo sostenible consiste en para satisfacer las necesidades de las generaciones actuales sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades.

Para conseguirlo, se han de seguir una serie de acciones:

• Guardar, almacenar y no desperdiciar;
• Optar por energías alternativas;
• No contaminar;
• Aplicar políticas de residuos (3 Rs o 4 Rs por ejemplo).