La Rebelión en la India de 1857, Motín de la India o Rebelión de los Cipayos fue una popular revolución armada ocurrida en la India, entre 1857 y 1859, contra la dominación y la explotación británica en su territorio.
Contexto histórico
En la segunda mitad del siglo XIX, Inglaterra adoptó una política colonialista e imperialista, dominando las diferentes regiones de África y Asia. Los británicos tenían como propósito explotar los recursos minerales y mano de obra de estas regiones, además de ampliar el mercado consumidor para sus productos industrializados. Como casi toda acción genera una reacción, varios pueblos o grupos no aceptaron el sistema abusivo y partieron para la reacción contra las fuerzas dominantes.
Principales causas
Los británicos obligaron a los jóvenes a participar en el ejército indio del British East la India Company. Estos jóvenes soldados, que llegó a ser conocidos como cipaios, tenían como función principal garantizar la protección de la actividad comercial británica en la India.
Como las condiciones de trabajo de los cipayos eran terribles, incluso con muy bajos salarios, el sentimiento de rebelión que ya era grande, aumentó aún más.
Rebelión de soldados indios con los cartuchos utilizados en un nuevo rifle británico. Se rumoreaba que estos cartuchos fueron recubiertos por una película (especie de grasa) de origen bovino. Al igual que en el hinduismo, la vaca es un animal sagrado y este hecho generó mucha indignación resultando ser el detonante del conflicto.
Desarrollo del conflicto
La rebelión comenzó en 1857, y los cipayos tomaron las armas para luchar contra a las tropas británicas. La central y las regiones del norte de la India fueron los más afectados por el conflicto armado. Hubo varias muertes durante el levantamiento, siendo que muchos oficiales británicos fueron asesinados.
Antes, las tropas indias lograron varias victorias, provocando la retirada de los británicos. En 1857, los cipayos conquistaron y dominaron las provincias de la región central y varias ciudades importantes del norte de la India.
La revuelta terminó sólo en 1859, cuando los británicos aumentaron el poder militar en la región y reprimieron a los rebeldes.
Después de esta revuelta, las fuerzas militares británicas en la región se incrementaron e implementaron un sistema de control más fuerte y coercitivo.