En Europa, durante la edad media (siglo v al siglo XV), el feudo era un terreno o propiedad (bien material) que el señor feudal (noble) otorgaba a otro noble (vasallo). A cambio, el vasallo proporcionaría servicios al señor feudal, pagando impuestos y ofreciendo seguridad y lealtad.
Principales instalaciones
Un feudo medieval (territorio), por lo general, se componía de las siguientes instalaciones: castillo fortificado (residencia de los nobles y su familia), villa campesina (residencia de siervos), área de plantación, iglesia o capillo, molino, establo y granero.
Disputas feudales
Como en este periodo la propiedad sobre la tierra era sinónimo de poder económico, político y social, eran frecuentes las guerras y batallas por la disputa de feudos.