La benevolencia es un sustantivo femenino que tiene su origen en el latín ‘benevolentia’, que expresa la calidad de alguien que es benevolente, es decir, demuestra afecto y estima en relación a alguien.
La benevolencia significa demostrar bondad o buena voluntad hacia los demás, revelando el altruismo y empatía. Un amigo es un ser benévolo, porque tiene buenas intenciones, es sincero, abierto y tolerante a nosotros mismos.
En muchas ocasiones, la buena voluntad se relaciona con la religión y es un asunto de bondad hacia personas o seres vivos considerados inferiores. Por ejemplo: la gracia del señor está presente cada día de nuestras vidas.
Según la religión cristiana, la buena voluntad se relaciona con la caridad. Al ser cuestionado sobre el verdadero sentido de la palabra caridad para Jesús, Allan Kardec (pedagogo francés) respondió: ‘La benevolencia hacia todos, indulgencia para las imperfecciones de los demás, perdón de las ofensas’.