A lo largo de la Edad Media, la visión del mundo del hombre europeo lo llevó al aislamiento y el refuerzo del pensamiento religioso. Influenciado por los valores cristianos de la estabilidad y la inestabilidad de las invasiones bárbaras de la Edad Media, los hombres vivían presos dentro de los feudos. Lo desconocido y lo inusual serían palabras que provocarían malestar de una realidad sustentada por la armonía de las órdenes del clero, nobles y siervos.
Con el ascenso de la burguesía mercantil y la exploración de regiones, muchos de estos valores medievales fueron revisados y abandonados como parte del progreso. Sin embargo, muchas narraciones míticas que hablaban de tierras paradisíacas construyeron los ideales de las sociedades europeas. Además, varios informes también han hecho mención de bestias salvajes, habitantes de los mares y tierras hasta entonces desconocidas para los pueblos europeos.
Esta mezcla de fascinación y terror en los relatos y representaciones iconográficas hechas por el hombre moderno todavía guardaban valores en su imaginación. Con el advenimiento del descubrimiento de América, los colonizadores europeos encontraron un mundo donde muchas de estas situaciones imaginadas no se reflejaban en las llamadas civilizaciones pre-colombinas. Al mismo tiempo, esta pre-concepción de otro terminó haciendo del nativo americano un ser despreciado por los europeos.
Toda esa condición de admiración y al mismo tiempo repudio, hizo que se apartase una rica variedad de valores culturales desarrolladas por los pueblos que en América ya existían. En el fin del siglo XV, periodo que marca la llegada de los españoles al continente, se daban tres grandes civilizaciones: los mayas, los aztecas y los incas. Muchas de las ciudades creadas por estas civilizaciones estaban en contra de cualquier centro urbano en Europa en el siglo XVI. Esta situación de conflicto acabaría culminando en el mayor genocidio de toda la historia de la humanidad.
Mientras que muchos rasgos de esta cultura se perdieron en el proceso de colonización, vemos en las sociedades pre-colombinas una gran variedad de reflexiones sobre la relatividad cultural. Conociendo un poco más la situación de esos pueblos podemos examinar las acciones que impuso Europa sobre el continente americano.
