El movimiento de traslación (desplazamiento de la Tierra alrededor del Sol), junto con la inclinación del eje terrestre en 23°27′ respecto al plano orbital, es el responsable de la variación de la energía solar que alcanza la superficie de la Tierra en un momento específico del año. Este fenómeno es responsable de las cuatro estaciones: primavera, verano, otoño e invierno.
La primavera es la temporada que comienza con el final del invierno. En el hemisferio sur, la primavera comienza el 23 de septiembre y termina el 21 de diciembre; en el hemisferio norte, la temporada comienza el 22 de marzo y termina el 21 de junio.
La característica principal es el renacimiento de la flora de primavera, que se considera la temporada más colorida del año. Este período está marcado por hermosos paisajes formados por la naturaleza, con una gran variedad de flores como las orquídeas, jazmines, violetas, hortensias, crisantemos, entre otros.
La temperatura durante la primavera es bastante agradable. Sin embargo, es importante señalar que estas estaciones están bien definidas sólo en la zona templada del hemisferio norte (entre el Círculo Polar Ártico y el Trópico de Cáncer) y en la Zona Templada del Sur (entre el Círculo Polar Antártico y el Trópico de Capricornio).