OVNI es un acrónimo que corresponde a objetos voladores no identificados, que a su vez es una traducción de otro acrónimo, que apareció previamente en Inglés, UFO (Unidentified Flying Object). Este acrónimo con el tiempo se convirtió en un término en sí mismo, como término genérico utilizado para referirse a cualquier cuerpo que se desplaza en el cielo y que no se podría definir, con luces y objetos desconocidos. Rápidamente, OVNI se ha vuelto sinónimo de nave extraterrestre. Las personas que se dedican al estudio de estos aspectos, investigadores o simples aficionados entusiastas se llaman ufólogos.
El origen del término en el idioma inglés se remonta a mediados del siglo XX, y se acredita con los aviadores de los Estados Unidos, que habrían acuñado el acrónimo en medio de la controversia de los incidentes ocurrieron en la ciudad de Roswell, en el estado de Nuevo México, donde un nave extraterrestre habría caído en 1947.
Aunque en la mayoría de los casos los supuestos OVNis llegan a ser algo conocido, tal como un globo meteorológico o las luces de una aeronave, aproximadamente un 5 a 10% de las apariciones permanecen sin explicación científica. Más allá de las apariencias, se acumulan a través de los años presuntos casos donde las personas han sido secuestradas para realizar las más diversas experiencias con sus cuerpos. Otras manifestaciones más leves de los alienígenas serían patrones extraños que surgen en las cosechas, la vegetación quemada o desbastada longitudinalmente, cadenas como telarañas que cuelgan de postes telefónicos, árboles que se desintegran al tacto, y la mutilación de animales, encontrados sin sangre, sin vísceras y sin ninguna indicación del autor de los cortes.
La certeza con respecto a la cuestión es que el tema genera mucha controversia, oponiéndose a los que creen en la presencia de los ovnis y los que dicen que necesitan más pruebas científicas.
Inicialmente, ni siquiera el gobierno estadounidense ha mostrado mucho interés en el estudio sistemático de los ovnis, siendo la fuerza aérea del país la primera en abordar el tema en 1948, con un programa llamado Project Sign. Posteriormente, el nombre del programa se cambió el Project Blue Book. Entre 1948 y 1969 el gobierno investigó más de doce mil avistamientos de ovnis. De entre ellos, 11.917 tenían una explicación alternativa, y representaron vistas erróneas de globos meteorológicos y satélites o fenómenos meteorológicos como tormentas de rayos y reflejos, sucesos astronómicos simples, o incluso engaños. Los casos restantes (701 avistamientos) no han tenido una respuesta satisfactoria desde el punto de vista científico. El proyecto fue cerrado en 1969, supuestamente por falta de pruebas concluyentes. Las conclusiones finales de los estudios fueron:
1) Ningún OVNI descrito, investigado y evaluado dio cualquier signo de amenazada a la seguridad nacional.
2) No existen pruebas concluyentes sobre las apariciones clasificadas como no identificadas y si estas representan principios tecnológicos o avances más allá del límite de los conocimientos científicos actuales.
3) No hay prueba indicativa sobre que las apariciones no identificadas constituyan vehículos extraterrestres.