En algún momento ya debes haber retirado tus zapatos o tenis y haber sentido aquel olor desagradable.
¿De dónde viene el mal olor de pies? En todo nuestro cuerpo poseemos glándulas que producen un líquido llamado sudor. Cuando sudamos, decimos que estamos transpirando. Existen personas que transpiran más que otras –eso depende del organismo.
El sudor se puede sentir en todo el cuerpo, pero principalmente en las axilas, la cara, las palmas y las plantas de los pies. En la planta de nuestros pies hay miles de glándulas sudoríparas.
Cuando usamos calzado ajustado, los pies comienzan a sudar y este sudor no tiene adónde ir. Luego, las bacterias en nuestro cuerpo comienzan a alimentarse de ese sudor mezclado con células muertas de la piel, y el resultado de esa acción es el mal olor que las bacterias, a veces acompañadas de hongos, exhala.
- Hay algunas maneras de evitar el mal olor de pies. Para tener los pies apestosos es muy importante seguir algunos consejos:
- Usa calcetines de algodón, ya que absorben el sudor de los pies.
- No uses calcetines más de una vez.
- Colocar los zapatos o tenis al sol, de modo que sequen el sudor, reduciendo la cantidad de bacterias.
- Secar bien los pies después de bañarse, especialmente entre los dedos.
- Si es posible, no usar el mismo calzado todos los días.
- Evita usar zapatos de goma y material plástico, ya que se calientan y no deja que tus pies sean ventilados, lo que facilita la producción de sudor, y el aumento de la probabilidad de aparecer mal olor.
- Usar polvos de talco adecuados para los pies y así eliminar la cantidad de sudor producido.
