El educador evangélico estadounidense Walter Kaiser, Jr. (1933-) enumera los siguientes descubrimientos como los diez más importante de la arqueología bíblica.
- I. Los amuletos de Ketef Hinnom, que contienen el texto más antiguo del Antiguo Testamento (siglo VII a.C.) descubierto por el arqueólogo bíblico húngaro-israelí Gabriel Barkay (1944- ).
- II. El Papiro de John Rylands (1801-1888), que contiene el texto más antiguo del nuevo testamento (125 d.C.).
- III. Los Manuscritos del Mar Muerto, casualmente descubiertos por un grupo de pastores de cabras (1947), en su mayoría escritos antes de la era cristiana y guardados en rollos, dentro de una vasija de baro.
- IV. La Pintura Mural en la tumba de Beni Hasan, Tebas. Se trata de una pintura de la tumba de un noble en Beni Hasan, Egipto. Data de los tiempos de Abraham (~ XIX a.C.) revelando cómo era la cultura patriarcal diecinueve siglos antes de Cristo.
- V. El Escudo de David, descubierto en 1993. Se trata de un símbolo real, un sello de la realeza que demuestra la existencia del rey David bíblico (1015-975 a.C.) y su reinado.
- VI. Tablilla once del épico de Gilgamés, descubierto en 1872 por el arqueólogo bíblico y asiriologista inglés George Smith (1840-1876). Probó la antigüedad del relato del diluvio descrito en la Biblia.
- VII. La Fuente del Gihón, mencionada en Samuel 2:13 y Jeremías 41:12, investigada en 1833 por el arqueólogo estadounidense Edward Robinson. La inscripción de Siloé es un pasaje de texto inscrito, encontrado originalmente en el Túnel de Ezequías, acueducto que abastecía agua de la Fuente de Gihón para Siloé en la parte este de Jerusalen. Descubierto en 1880, la inscripción registra la construcción del túnel en el siglo VIII a.C. Se encuentra entre los registros más antiguos escritos en lengua hebre, usándose el alfabeto paleo-hebreo.
- VIII. El sello de Baruc, demostró la existencia del escriba y confidente del profeta Jeremías. El profeta, durante los últimos años del reino de Judá, profetizó el exilio y retorno de judíos. Ellos tendrían que aceptar el yugo de Babilonia y no resistir. Fue encarcelado, amenazado de muerte y colocado como falso profeta y traidor. En 1975 se descubrió en una tienda de antigüedades de Jerusalén algunos pedazos de barrio impresos con un sello. Dentro de esa colección había dos piezas que se creen haber pertenecido a Baruc. Se encuentra en exhibición en el Museo de Israel en Jerusalén.
- IX. El Palacio de Sargón II, rey de Asiria mencionado en Isaías 20: 1, descubierto en 1843 por Paul Emile Botta (1802-1870), de cuya existencia los historiadores seculares dudaron hasta este descubrimiento. El hallazgo puso fin a la negación histórica, conforme a lo mencionado en Isaías 20:1.
- X. El Obelisco negro de Salmanasar III, un artefacto que el arqueólogo Austen Henry Layard (1817-1894) encontró en la antigua ciudad de Nínive. Es uno de los más antiguos artefactos arqueológicos que se refiere a un personaje bíblico: el rey hebreo Jehú. Vivió cerca de nuevo siglos antes del nacimiento de Cristo. Esta reliquia bíblica se encuentra preservada en el Museo británico en Londres.