Las latitudes y longitudes son importantes porque posibilitan la ubicación y dirección de cualquier punto existente en la superficie de la Tierra. La combinación de latitudes y longitudes forman la construcción de coordenadas geográficas
Las redes de representación y localización de los diferentes puntos de la Tierra se estructuran a partir de la conjunción entre las latitudes y las longitudes. Esas líneas imaginarias permiten abordar espacialmente cualquier punto geográfico de la Tierra y son trazadas horizontal y verticalmente, es decir, de forma paralela y perpendicular al eje principal de nuestro planeta.
Las latitudes son las coordenadas trazadas en cualquier punto de la Tierra en relación con el ecuador, una línea imaginaria que divide el mundo en dos hemisferios iguales: el norte y el sur. Por lo tanto, la línea de ecuador tiene latitud 0º, yendo hasta 90ºN y 90º sur, en dirección a los polos de la Tierra.
El sistema de composición de las latitudes permite la formación de los paralelos de la Tierra, que son las líneas imaginarias trazadas en el sentido perpendicular al eje principal de nuestro planeta. Algunos de esos paralelos reciben nomenclaturas especiales, pues demarcan algunas zonas de iluminación solar.
Además de la línea de ecuador, ya citada, los principales paralelos de la Tierra están listados a continuación con sus respectivas latitudes:
- Trópico de Cáncer: 23,5ºN
- Trópico de Capricornio: 23,5ºS
- Círculo Polar Ártico: 66,5ºN
- Círculo Polar Antártico: 23,5ºS
Las longitudes, a su vez, son las coordenadas extraídas del meridiano de Greenwich, que de este modo mide 0º de longitud. Así que todo lo que está más allá de ese punto de referencia tiene longitudes que van hasta 180ºW (oeste) o incluso 180ºE (este).
Las longitudes permiten la demarcación de los meridianos, que son líneas imaginarias trazadas paralelas al eje principal de la Tierra. En teoría, los meridianos no tienen un punto de partida, ya que, a diferencia de los paralelos, ellos son todos del mismo tamaño, como un semicírculo. Sin embargo, Greenwich fue escogido como el Meridiano Principal a partir del final del siglo XIX.
Además de ayudar en la localización de los puntos terrestres, las longitudes sirven como referencia para las zonas de tiempo de la Tierra. Por lo tanto, por cada franja de 15º de longitud, tenemos la variación de un huso.
La combinación de los valores de latitudes y longitudes, además de los meridianos y paralelos, permite la formación de coordenadas geográficas que se utilizan para identificar y georreferenciar todos los puntos del planeta.
« GPS
