La secreción nutritiva de color blanquecino y opaco producida por las glándulas mamarias de las hembras de los mamíferos es denominada de leche.
La composición de la leche puede variar, pero su constitución estándar debe contener: 87,1% de agua, 3,4% de proteínas, 3,9% de grasas, 4,9% de carbohidratos (azúcares) y 0,7% de sales minerales, además de varias vitaminas.
La leche es un alimento muy nutritivo y se convierte en esencial en los primeros meses de vida de todos los mamíferos.
La grasa de la leche tiene unas características muy interesantes, es responsable de la coloración blanquecina de este líquido. La química puede explicar el color lechoso de la leche a través de las propiedades de las grasas.
La grasa está presente en la leche en forma de pequeños glóbulos, estos tienden a juntarse. Para obtener una leche homogenizada es necesario emulsionar (mezclar) tales glóbulos. La grasa, estando dispersa en la leche, difunde la luz incidente y confiere al mismo el color blanco opaco.