La presencia de un soluto no volátil en una solución puede conducir a la aparición de tonoscopia, esta es una propiedad coligativa que conduce a una disminución de la presión de vapor de un líquido.
Importante: cuanto mayor sea el número de moles del soluto no volátil en la solución, mayor será la reducción de la presión máxima del vapor.
La presión de vapor de una solución corresponde a la cantidad de solvente en la fase gaseosa y existe una relación entre la disminución de la presión máxima del vapor y el número de moles de soluto presente en una solución. Aquí está cómo demostrar en la práctica la propiedad de la Tonoscopia.
Material
- 2 envases transparentes (vasos o tazas)
- Líquido puro (agua)
- Líquido con soluto no volátil (agua con azúcar)
- Envase de cristal (vasija para guardar pasteles).
Procedimiento
- 1. Ponemos en un recipiente el agua pura y en el otro el agua mezclada al soluto no volátil.
- 2. Cubrimos los dos recipientes con el envase de cristal.
- 3. Esperamos y hacemos la siguiente observación: el volumen del líquido puro va a disminuir, mientras la solución con soluto va a aumentar. ¿Por qué ocurre esto?
Las soluciones tienden a un equilibrio que es alcanzado cuando las presiones de vapor del líquido puro se igualan a la presión del vapor de la solución. La presión máxima de vapor del agua = 31,82 mmHg a una temperatura media de 30 °C (temperatura en el interior del recipiente). La solución con soluto no-volátil posee presión máxima de vapor menor que la de agua pura, esos valores explican el experimento descrito anteriormente.
El científico francés Francois Marie Raoult, estudió estas propiedades y llegó a una conclusión: la presión de vapor de un líquido puro es igual a la presión de vapor de un líquido solvente si es considerada la fracción molar. Ese concepto dio origen a la llamada Ley de Raoult.