La causa de la amebiasis es una infección del protozoo Entamoeba histolytica, que puede beneficiarse de su huésped sin causar beneficio o daño, o incluso actuar de forma invasiva. En este caso, la enfermedad puede manifestarse en el intestino o fuera de él.
Síntomas
Sus principales síntomas son dolor abdominal, que puede variar de leve a moderado, heces con sangre, diarrea acompañada de sangre fuerte o mucosas, fiebre y escalofríos.
En casos más severos, la forma trofozoítica del protozoo puede diseminarse a través del sistema circulatorio y, por tanto, afectar el hígado, los pulmones o el cerebro. El breve diagnóstico en estos casos es muy importante, ya que esta condición clínica puede causar la muerte del paciente.
Transmisión
La amebiasis se transmite a los humanos a través del consumo de alimentos o agua contaminada con heces fecales con quistes de amibas, la falta de higiene en el hogar, y también a través de la manipulación de alimentos por portadores del parásito.
Una vez dentro de su organismo huésped, en este caso, el hombre, el período de incubación puede variar desde días a años; sin embargo, en general, se puede asignar un período común de dos a cuatro semanas.
Diagnóstico
El diagnóstico más común se realiza por la presencia de trozoítos o quistes del parásito en las heces, pero también puede ocurrir a través de endoscopia o proctoscopia, mediante el análisis de los abscesos o cortes del tejido. Si no se trata, esta enfermedad puede durar años.
Prevención
Al igual que con la mayoría de las enfermedades, la mejor medida de prevención sigue siendo, en este caso, los cuidados personales a través de medidas de higiene más estrictas con las personas que manipulan alimentos, saneamiento regular, evitar el consumo de agua de dudosa procedencia, desinfectar hortalizas, frutas y verduras antes de consumirlas, lavarse las manos antes de manipular cualquier alimento, y especialmente después de ir al baño.