La hora feliz (en inglés: happy hour) es una reunión relajada con colegas de trabajo, en bares, pubs y discotecas normalmente; puede también ser celebrada entre compañeros de clase. La hora feliz es común en muchos países, como en Argentina.
La expresión procede del inglés. Literalmente, la traducción de happy hour es hora feliz. El origen del concepto surge en la década de 1920, en la marina americana, cuando ‘happy’ era una palabra usada por los marineros para designar que una persona estaba un poco ebria. La hora feliz era un momento de ocio entre los marineros.
Ley seca
En los Estados Unidos, entre los años de 1920 y 1933, las bebidas alcohólicas fueron prohibidas. En todo el territorio, la fabricación, transporte, comercio, importación y exportación de bebidas de fuerte contenido alcohólico se volvió ilegal. Fue un periodo conocido como Ley seca.
Las principales bebidas incluidas en la prohibición de la Ley seca eran:
- Coñac;
- Ron;
- Vino;
- Whisky.
La prohibición también recibió el nombre de The Noble Experiment (del inglés, El Noble Experimento, en traducción literal). Había la creencia de que el consumo de alcohol era una de las principales causas de la delincuencia y, con la medida, el gobierno creía poder reducir la tasa de criminalidad. Más temprano, la medida fue bastante popular, pero fue perdiendo rápidamente la lealtad de la población y el resultado fue el opuesto al deseado: surgió el comercio ilegal apoyado por las mafias, que creció debido a cierta indiferencia del gobierno, que hacía la vista gorda.
Las personas de la alta sociedad se reunían en lugares clandestinos para beber antes de salir para comer en lugares públicos.
La Ley seca terminó por fortalecer la costumbre de la happy-hour.
Al Capone
Una de las figuras más emblemáticas de la historia de esta época sólo podían surgir y crecer en importancia gracias a la Ley Seca. Al Capone, apodado de Scarface (en referencia a una cicatriz en su rostro) fue considerado uno de los mayores gánsteres de la historia; cometió crímenes como la evasión de impuestos e incluso asesinatos, financiado siempre por el tráfico de bebidas.
Happy-hour en la década era de 1960
En el intervalo entre el final de la Ley Seca y la década de 1960, el hábito de la hora feliz no desapareció, aunque, en 1959, el periódico Saturday Evening Post se refirió a la costumbre de ingerir bebidas alcohólicas antes de la cena y acabó por difundir todavía más la hora feliz, que ya no era más limitada a las clases altas.
Happy-hour en la actualidad
Hoy en día el hábito de la hora feliz es más fuerte que nunca. Los locales de bebidas se aprovechan de la popularidad de la costumbre como una estrategia de marketing mediante la atracción de más clientes porque en muchos lugares, durante esas horas, las bebidas son comercializadas con un precio inferior.
Bares y restaurantes se aprovechan de la hora feliz e invierten en lugares cálidos, en golosinas y snacks típicos de bares, música en vivo, hacen ofertas y otros elementos que puedan ofertar y atraer a sus clientes.