Las primeras sociedades surgieron por primera vez en el planeta durante la prehistoria, pero más concretamente durante el periodo paleolítico. La palabra “Paleolítico” es de origen griego y significa “edad de piedra” (paleo significa “piedra” y litio “edad”. Durante este período, la población era dominada por cazadores y recolectores, así como los esquimales. La palabra “esquimal” significa literalmente “comedor de carne cruda”.
Originarios del noreste de Asia a través del Estrecho de Bering, los esquimales llegaron a Alaska en el Ártico, una de las regiones más frías del planeta hace aproximadamente 15 000 años, donde establecieron su hogar pese a las condiciones climáticas. Al compartir el mismo hábitat que los osos polares han aprendido algunos de sus hábitos para sobrevivir, cómo mover el hielo y la construcción de viviendas contra el frío (iglúes). También comen carne y grasa de los osos y utilizan su piel para la fabricación de abrigos improvisados. A medida que la tierra helada se congelaba e impedían la plantación, se alimentaban de peces y la caza.
Los esquimales viven en los sistemas patriarcales en que el hombre puede tener varias esposas, según su poder adquisitivo. Hay una costumbre entre los esquimales para dar a su esposa a un visitante con el fin de protegerlo del frío y como signo de generosidad. Creen en seres superiores, pero no hacen oraciones u ofrendas. De acuerdo con sus creencias, los niños son encarnaciones de sus antepasados.
Cuando llega el invierno, los esquimales están en busca de alimentos porque el hielo congela los ríos cercanos, haciendo de la pesca un problema. En la primavera, parte del hielo se derrite, dando paso a las ballenas y posibilitando su caza para alimentarse. Se acercan poco a poco con su arpón para dar caza a estos animales acuáticos.
Los esquimales están organizados en comunidades donde la humildad prevalece. Aprenden a vivir juntos como forma de sobrevivir. Cuando una ballena es perseguida, toda la comunidad ayuda en la pesca, el corte y la distribución entre ellos. Los esquimales hablan el idioma “Inuit”, que tiene variantes de acuerdo a los asentamientos donde viven. Desde el siglo XVII los Inuit tenían contacto con otros pueblos, lo que nos permitió el acceso a nuevas herramientas como armas de fuego y la creación de nuevas fuentes, como la madera. En la actualidad, los esquimales además de Alaska, viven en Canadá y Groenlandia, donde trabajan en las estaciones de radar.