El árbol genealógico es una representación de las personas que han tenido participación en la existencia de una persona o familia, es decir, es el histórico que refleja datos sobre los antepasados de los mismos de forma que queden conocidas las conexiones establecidas entre ellos (ramificaciones). Normalmente se coloca el nombre del antepasado más antiguo de quien se obtienen datos y, a partir de ese, sus descendientes, hasta llegar al miembro más joven de la familia o hasta la persona en la que se tenga interés.
Para armar el árbol genealógico primero debemos averiguar de dónde vinieron los antepasados de una familia, lo que puede ser realizado a través del origen de los apellidos del padre y la madre de un individuo. Posteriormente, se deben anotar los siguientes datos:
- Nombre completo de todas las personas investigadas.
- Fecha y lugar de nacimiento.
- Certificado de matrimonio, constando fecha y lugar.
- Certificado de defunción, constando fecha y lugar.
- Información general sobre cada individuo, como una profesión, escolaridad, títulos especiales, historia de la familia en el país, origen del nombre, del apellido y más.
Es importante separar la investigación de cada persona, por ejemplo, del padre, madre, abuelo paterno, abuela materna, tíos, tías, primos, primas y así sucesivamente. Es importante saber lo que es un hecho de lo que es simple rumor, pues existen personas que transmiten información engañosa o incompleta sobre otras personas, volviendo el conocimiento obtenido irreal.
El árbol de familia es muy importante para la gente, porque a través del mismo se puede conocer el origen de la familia y descubrir la fuente de problemas, anomalías y enfermedades genéticas.