El plátano es una de las frutas más sabrosas y fáciles de comer. Mientras que una barra de cereal emplea varios recursos para su fabricación, el plátano tiene un coste de producción menor. De las ventajas y del sabor de la fruta no hay dudas, sin embargo, muchos suelen preguntarse dónde se encuentran sus semillas.
Contrariamente a lo que muchos pueden pensar, esos pequeños puntos negros presentes en el interior del plátano no son sus semillas, sino por el contrario, apenas óvulos no fecundados. Vale resaltar que se trata de un fruto partenocárpico, es decir, su ovario madura antes de que el óvulo sea fecundado. Así, los plátanos que conocemos, aquellos comestibles, no presentan semillas.
La reproducción de la bananera sucede de manera asexuada. Para plantar una nueva especie, es necesario cortar un trozo de la raíz y plantarlo, en el tiempo de reproducción denominada por los biólogos de propagación vegetativa.