El ecomalthusianismo es una teoría demográfica y ambiental que establece supuestos sobre la relación entre el crecimiento de la población y la naturaleza.
El Ecomalthusianismo es un concepto teórico que evalúa la relación de equilibrio entre la población y la presión ambiental, es decir, la presión ejercida por la sociedad sobre los recursos naturales, tanto renovables como no renovables. Como ya indica su nombre, este punto de vista se basa en la teoría demográfica del economista británico Thomas Robert Malthus.
La teoría clásica del malthusianismo fue desarrollada con el fin de expresar una preocupación por la escasez de alimentos en el mundo por delante del crecimiento de la población. En este sentido, en el siglo XVIII, Malthus en su Ensayo sobre el principio de la población, elaboró una teoría responsable de la siguiente premisa: el crecimiento de la población se produce en el ritmo de una progresión geométrica (2, 4, 8, 16, 32, 64, … ), mientras que en el crecimiento de la producción de alimentos se presenta como una progresión aritmética (4, 8, 12, 16, 20, 24, …).
Teniendo en cuenta los ideales malthusianos, se estableció un cierto alarmismo en la sociedad, ya que, según Malthus, la causa de la miseria de las sociedades serían las explosiones demográficas y por lo tanto la superposición del número de personas en la faz de la disponibilidad de alimentos existentes. Incluso cuando, posteriormente, las previsiones maltusianas no hayan sido confirmadas, gracias al intensivo crecimiento de la producción de alimentos y al control poblacional en la mayoría de los países, sus ideales fueron adaptados para otros frentes conceptuales.
En este sentido, nació a finales del siglo XX una serie de interrelaciones entre estos ideales y la preocupación por el medio ambiente. Los ecomalthusianos creen, por lo tanto, que el crecimiento poblacional está poniendo mayor presión sobre los recursos naturales y genera un mayor impacto sobre el medio natural con el fin de intensificar los problemas como el calentamiento global, la deforestación, la extinción de los recursos, los problemas ambientales urbanos y muchos otros.
El ecomalthusianismo – a diferencia del malthusianismo y de acuerdo con el neomalthusianismo – sostiene que la lucha contra los problemas ambientales también implica el control del crecimiento de la población a través de anticonceptivos. Así que adoptar esto como una perspectiva de política pública es también una manera de promover una sociedad sostenible.
Aunque estos supuestos están en un proceso de amplia aceptación social, también hay críticas al ecomalthusianismo. En general, se afirma que esta teoría ignora factores económicos como predominantes en el proceso de aumento de presión sobre los recursos naturales. Los países desarrollados, por ejemplo, incluso con menos del 20% de la población mundial, representan casi el 80% de toda la contaminación generada en el mundo, así como otros impactos ambientales. Estas sociedades, a pesar de la drástica reducción en sus tasas de natalidad, siguen generando grandes impactos sobre los recursos naturales.
Fotografía © The Guardian