El humanismo puede definirse como un conjunto de ideales y principios que valoran las acciones humanas y los valores morales (respeto, justicia, honor, amor, libertad, solidaridad…). Para los humanistas, los seres humanos son responsables de la creación y desarrollo de estos valores. De esta forma, el pensamiento humanista entra en contradicción con el pensamiento religioso que dice que Dios es el creador de estos valores.
Aparición y desarrollo
El humanismo se ha desarrollado y manifestado en varias ocasiones en la historia y en diversos campos del conocimiento y las artes.
El humanismo en la antigüedad clásica (Grecia y Roma) se manifestó principalmente en la filosofía y las bellas artes. Las obras de arte, por ejemplo, valoran mucho el cuerpo humano y los sentimientos.
El humanismo floreció principalmente durante el Renacimiento, en los siglos XV y XVI, momento en que artistas, escritores (renacentistas) rescatan los valores humanistas de la cultura greco-romana. El antropocentrismo (el hombre es el centro de todo) ha guiado el desarrollo intelectual y artístico de esta fase.
El positivismo se desarrolló en la segunda mitad del siglo XIX. Esta corriente filosófica valora el pensamiento científico, lo destaca como única forma de progreso válida. Tenía su principal idealizador a Auguste Comte.