Dióxido de carbono, también conocido como gas carbónico, es una sustancia química formada por dos átomos de oxígeno y uno de carbono. Su fórmula molecular es CO2. Su peso molar corresponde a 44,01 g/mol.
Importancia
Es un gas importante para el reino vegetal, pues es esencial en la realización del proceso de fotosíntesis de las plantas (proceso por el cual las plantas transforman la energía solar en energía química).
Problemas causados
Este gas es liberado en el proceso de respiración (en la expiración) de los seres humanos y también en la quema de combustibles fósiles (gasolina, diesel, queroseno, carbón y vegetales). La gran cantidad de dióxido de carbono en la atmósfera es perjudicial para el planeta, porque provoca el efecto invernadero y, en consecuencia, el calentamiento global.
Uso comercial
Este gas se utiliza comercialmente en algunas bebidas (gasificadas) y también en extintores. Si se inhala en grandes cantidades, puede causar irritación de las vías respiratorias, vómitos, náuseas e incluso la muerte por asfixia (que se produce generalmente en los incendios).