El agua potable es aquella que reúne las características de condiciones aptas para el consumo humano. Por lo tanto, el agua potable debe estar libre de cualquier tipo de contaminación.
El agua potable puede ser de una fuente natural, puesto que no hay ningún tipo de contaminación en su origen o recorrido. Puede también obtenerse a través de un proceso de tratamiento y físicos o químicos. En las ciudades, este proceso se realiza en las plantas de tratamiento de agua.
Dependiendo de la calidad original del agua, se aplican uno o más procesos de tratamiento. Entre los procesos de tratamiento de agua principal, podemos mencionar: decantación, filtración, desinfección, floculación y fluorización.