La ciudad de Londres fue fundada por los romanos en el año 43. Situado a orillas del río Támesis, los romanos lo llamaron Londinium.
Debido a su importancia en la región, fue la capital de la provincia Romana Británica en el siglo II. En este siglo, la ciudad estaba rodeada por una muralla.
En el siglo III, la población de Londres era aproximadamente de 50 mil habitantes.
Después de la caída del imperio romano (siglo V), la ciudad perdería a muchos habitantes con la migración de las tropas romanas y también el abandono de la población local. Entre los siglos V y IX la ciudad estaba prácticamente despoblada.
Sólo en el siglo IX, con la reconstrucción del puente sobre el río Támesis, la ciudad volvió a adquirir importancia y atraer a la gente.
En el siglo X, Londres se convirtió en un importante centro comercial.
En el inicio del siglo XI, el rey sajón Etelredo I de Wessex comenzó a utilizar a Londres como sede de gobierno, convirtiéndose en capital.
En el comienzo del siglo XI se construyó el castillo de torre de Londres, la residencia oficial de los reyes de Inglaterra.
Durante el reinado de Isabel I (1558-1603), la ciudad de Londres presenta un gran desarrollo urbano y social.
Durante el reinado de Jaime I, la ciudad sufrió un importante proceso de urbanización.
En 1665 población Londres sufrió una gran epidemia de peste bubónica. Casi una cuarta parte de la población londrina murió víctima de la enfermedad.
En 1666 otra catástrofe aconteció a Londres. Un incendio importante destruyó gran parte de la ciudad. La reconstrucción de la ciudad duró casi 15 años.
En el siglo XVIII, la ciudad de Londres fue una de las ciudades más grandes y más importantes de Europa. Comenzó a atraer a muchos inmigrantes, principalmente judíos. Este gran crecimiento urbano se produjo debido, principalmente, a la Revolución Industrial. Muchos habitantes de la zona rural de Inglaterra emigraron a Londres en busca de trabajo y mejores condiciones de vida.
Durante la segunda guerra mundial (1939-1945), gran parte de la ciudad fue destruida por los ataques aéreos alemanes. El proceso de reconstrucción tomó 10 años.
El Londres moderno es considerado una de los lugares más grandes y más importantes del mundo. Cuenta con casi 12 millones de habitantes. Es una ciudad con un alto grado de desarrollo social y urbano.
Curiosidad
Londres comenzó a construir su red de metro en 1863.