Saturno, como cualquier planeta, presenta sus peculiaridades, una de ellas está en los anillos que adornan su superficie, por lo menos, son los únicos que pueden verse desde la Tierra por los astrónomos. Júpiter y Urano también tienen anillos, pero no son visibles como en el caso de Saturno.
Las sondas espaciales Voyager 1 y Voyager 2 registraron la existencia de los anillos, que puede explicarse a través de dos teorías distintas:
- La primera de ellas dice que los anillos son producto de la colisión entre asteroides cerca del planeta. El choque producido habría lanzado rocas y polvo que se acumularon en la forma de anillos alrededor de Saturno.
- La segunda teoría sostiene que la aparición de los anillos se dio en el momento de la formación del propio planeta. Las nubes de polvo y gas que componen los anillos serían del material sobrante de la formación de Saturno.
Independientemente del origen de los anillos de Saturno, un hecho es cierto, ellos encantan a la astronomía por la belleza de la materia gélida y brillante que los compone; tal adorno confiere al planeta un destaque mayor frente a los otros miembros del Sistema Solar.