Cesarismo (de Julio César) es un concepto utilizado por muchos autores para definir un sistema de gobierno centrado en la autoridad suprema de un líder militar y la creencia en su capacidad personal, a la que se suelen atribuir rasgos heroicos. Este líder, apareció en los momentos de inflexión política, y se presenta como la alternativa para regenerar la sociedad o conjurar hipotéticos peligros internos y externos. Por lo tanto, este tipo de gobierno por lo general tiene elementos de culto de la personalidad que es respetada o adorada por la sociedad por sus actos. El cesarismo se volvió un concepto de las teorías políticas adoptado desde el siglo XIX.
Por lo general, se considera que sus exponentes son clásicos como Julio César, Oliver Cromwell, Napoleón I, Napoleón III y Bismarck que han tenido gran importancia en el foco histórico de los siglos. El cesarismo se caracteriza también por la adopción de soluciones militares a problemas políticos, recurriendo a la guerra como forma de imponer su voluntad y sus intereses a los opositores.
La palabra bonapartismo se utiliza a menudo como sinónimo de cesarismo, aunque algunos autores establecen diferencias conceptuales, lo que restringe su aplicación a su propia ideología del gobierno de Napoleón I. Gramsci, por ejemplo, considera el bonapartismo como una manifestación de cesarismo burguesa.