La censura es el uso por el estado o grupo de poder, para controlar y prevenir la libertad de expresión. La censura criminaliza ciertas formas de comunicación, o incluso el intento de ejercer la comunicación bajo la manipulación ideológica. En el sentido moderno, la censura es cualquier intento de suprimir la información, omitir fragmentos de la realidad u opiniones e incluso las formas de expresión, tales como ciertas facetas del arte.
El propósito de la censura está en mantener el status quo y evitar un cambio de pensamiento de un grupo particular y el consiguiente deseo de cambio. Por lo tanto, la censura es muy común entre algunos grupos, tales como ciertos grupos de interés y de presión (lobby), las religiones, las corporaciones y los gobiernos como una manera de mantener el poder. La censura también se trata de evitar ciertos conflictos y que algunas discusiones encuentren un arreglo.
La censura puede ser explícita, si está prescrita por la ley, que prohíbe que la información sea publicada o de acceso, después de haber sido examinada por un órgano de censura que evalúa si la información puede o no puede ser publicada, o puede tomar la forma de intimidación o de gobierno popular, donde la gente tiene miedo de expresar o mostrar el apoyo a ciertos puntos de vista, por temor a represalias e incluso el ostracismo personal y profesional, como ocurrió en los Estados Unidos de América con el período del McCartismo.
La censura también se puede entender como la supresión de ciertos puntos de vista y opiniones en conflicto, a través de la propaganda, la manipulación de los medios de comunicación o la contrainteligencia. Estos métodos tienden a influir y manipular a la opinión pública con el fin de evitar que otras ideas que no tienen receptividad dominante o dominante.
Una forma moderna de la censura tiene que ver con el acceso a los medios de comunicación y también con las autoridades de reglamentación (que asignan licencias de radio y televisión), o con criterios editoriales discrecionales (por ejemplo, cuando un periódico no publica una noticia en particular).
A veces la censura se justifica en términos de proteger al público, pero en realidad esconde una posición de presentar a los artistas para el Estado y la infantiliza al público, considerado como capaz de pensar por sí mismo.
Actualmente, la censura se puede superar con mayor eficacia con el uso de la Internet, gracias a un fácil acceso a los datos sin fronteras geográficas y los sistemas descentralizados de las redes de intercambio de archivos peer-to-peer como Freenet.
El uso habitual de la censura promueve un movimiento de defensa bastante corrosivo que es la auto-censura, cuando los productores culturales y formadores de opinión evitan tratar temas conflictivos y divergentes.
En el mundo actual de la información, la censura es de suma importancia para la comunicación. También vinculados a la Internet, donde los temas surgen y se desarrollan sobre los acontecimientos cotidianos, la censura tiende a perder su efecto y más tarde se reflejan directamente en su ausencia directamente en la sociedad. En estos casos, la falta de censura se convierte en un agravante para todo el país.