La capa de ozono se encuentra a unos 10-50 km por encima de nuestras cabezas. Químicamente está formada por tres átomos de oxígeno unidos entre sí (Fórmula molecular: O3).
El oxígeno es una molécula compuesta por dos átomos de oxígeno (O2), los rayos ultravioletas procedentes del Sol disocian la molécula y los átomos de oxígeno se separan quedando libres, para enlazarse al oxígeno molecular (O2), lo que origina el ozono, de acuerdo con la figura:
Fig. 1. Mecanismo de formación de la molécula de ozono
El ozono es la capa que nos protege de los rayos ultravioleta procedentes del sol, pues sirve de filtro a la radiación solar ultravioleta (UV), desempeñando una función esencial para la vida en la Tierra. Estas radiaciones pueden provocar cáncer de piel y también pueden dañar el sistema inmunológico humano, haciendo a las personas más vulnerables a enfermedades infecciosas. Se calcula que una disminución del 1% en el espesor de la capa causa un aumento de 3 a 6% en la aparición del cáncer de piel.
Cualquier cambio en la capa de ozono puede modificar drásticamente el clima.
¿Qué es el agujero de la capa de ozono?
Se oye hablar con frecuencia del agujero de la capa ozono, en realidad esto no es un verdadero agujero, sino una disminución en el espesor de la capa.
Cada año, durante primavera en la Antártida reaparece el ‘agujero’ de ozono que tiene el tamaño de los Estados Unidos. A lo largo del año, con los cambios de vientos el ‘agujero’ se llena de ozono procedente del restante planeta, lo que implica una disminución del espesor de la capa en los otros lugares. Sólo a título de ejemplo, en Canadá durante el Invierno la capa de ozono estaba cerca de 20% por debajo de sus valores normales.
La causa de la disminución de la capa, ya todos sabemos que tiene que ver con la contaminación, y de ella el uso de los clorofluorocarbonos (CFC) es el principal responsable. Los CFC son compuestos químicos que se encuentran en los gases utilizados para la refrigeración, como en las rejillas refrigeradoras de los frigoríficos y aparatos de aire acondicionado, estando también presentes en algunos aerosoles (vulgarmente designados como sprays).
Estos CFC tienen cloro en su composición y cuando alcanzan la capa de ozono por el cloro el cloro a través de los rayos ultravioleta disocian las moléculas de ozono, dirigiendo esos átomos a formar nuevas moléculas de O2 y no de O3, destruyendo así la capa.
Es importante tener en cuenta los productos que utilizamos en nuestra vida cotidiana. Lee los embalajes y escoge productos ecológicamente más adecuados.
