La caminata es una actividad física que ha ganado terreno en la rutina de las personas. Es muy sencilla, ya que no necesita una gran cantidad de equipos, se puede realizar de forma individual o colectiva en cualquier lugar, además de ser una buena opción para aquellas personas que no son adeptos a los deportes que requieren un gran esfuerzo. Puede ser realizado por cualquier persona, sin distinción de sexo o edad.
La actividad ayuda a perder peso, da forma al cuerpo, mejora la capacidad cardiovascular, proporciona sensación de bienestar, reduce la presión arterial, controla los niveles de colesterol, así como disminuye el riesgo de enfermedades como la osteoporosis y la diabetes.
La caminata más intensa, con pasos rápidos e ininterrumpidos, favorece un gasto calórico mayor que la caminata de ritmo de marcha normal.
Al caminar es importante tener en cuenta algunas técnicas, como por ejemplo: mantener la espalda y el abdomen firmes y contraídos; mantener los hombros en línea recta; usar tenis adecuado para la caminata; hacer estiramientos antes y después de la actividad; beber bastante agua para hidratar el cuerpo.
Consejos para iniciar la actividad física
- 1) Comenzar lentamente a ‘calentar’ los músculos.
- 2) Cambiar a un ritmo más intenso, evitando quedarse exhausto, es decir, de forma que pueda conversar durante el camino.
- 3) No interrumpir la caminata de forma repentina.
- 4) Disminuir el ritmo al final, caminando lentamente por 5 minutos.
- 5) No exceder el tiempo de 60 minutos de caminata.
- 6) Caminar de 3 a 6 veces por semana y reservar un día de reposo, para no correr el riesgo de lesiones.
- 7) Prestar atención principalmente al tiempo de caminata antes de preocuparse con la velocidad de la misma.
