Las briófitas son plantas avasculares (no poseen vasos conductores de savia) que crecen en suelos húmedos, piedras o troncos de árboles, siendo los musgos sus principales representantes. Vegetales de pequeño tamaño no superan los 5 centímetros de altura, aunque en Nueva Zelanda se encuentren briófitas de 40 cm, las briófitas presentan mayor especialización celular que las algas y son dotadas de varios tejidos diferenciados.
Como todos los vegetales, las briófitas presentan alternancia de generaciones en su ciclo de vida, siendo que la planta en sí, es decir, el individuo mayor, de vida independiente y duradera, es el gametofito haploide (n).El gametofito presenta rizoides, cauloides, filoides y los órganos reproductores. Esos órganos reproductores son: el anteridio, responsable por la producción de los gametos masculinos (llamados de anterozoide) y el arquegonio, responsable por la producción de los gametos femeninos, llamados de oosfera.
El esporofito de las briófitas es diploide (2n) y está menos desarrollado y de corta duración. Él se desarrolla siempre sobre el gametofito del cual depende para su nutrición. En razón de eso, muchos autores señalan al esporofito como parásito del gametofito. En el esporofito encontramos los esporangios que, a través de meiosis, forman esporas haploides (n).
La mayoría de briófitas son dioicas (plantas con sexos separados) pero existen algunas especies monoicas (estructuras reproductoras masculinas y femeninas). En las briofitas que realizan la reproducción asexuada, los anterozoides de las briofitas presentan dos flagelos capaces de nadar hasta alcanzar los gametos femeninos, fecundándolos. Por causa de eso, la reproducción sexuada de esos vegetales depende totalmente de agua en estado líquido.
Cuando los anterozoides llegan al arquegonio (órgano reproductor femenino) y fecundan la oosfera, se origina el cigoto, que, después de mitosis sucesivas, origina el embrión, permaneciendo protegido en el arquegonio y recibiendo sustancias nutritivas de la planta madre. El embrión se desarrolla por medio de nuevas mitosis que dan origen al esporofito. En su cápsula se desarrollan esporas, a partir de meiosis sufridas por las células madre. Estas son liberadas después de cierto periodo y el esporofito muere. Encontrando condiciones propicias, las esporas se desarrollan formando protonemas. Estas crecen y dan origen al musgo adulto que, más tarde, dará continuidad al ciclo.
Algunas briófitas presentan reproducción asexuada por fragmentación, en un proceso en el cual partes de un individuo o de una colonia generan nuevos gametofitos. Otro tipo de reproducción asexuada de las briófitas es por medio de yemas o propágulos, donde pequeños pedazos de planta se desprenden y son transportados por gotas de agua, originando nuevas plantas.
Las briófitas son divididas en tres clases:
- Clase Musci, de la cual los musgos forman parte.
- Clase Hepaticae, de la cual forman parte las hepáticas, plantas formas achatadas encontradas en lugares húmedos y sombreados.
- Clase Anthocerotae, de la cual forman parte los antocerotófitos, que también crecen en lugares húmedos y sombreados.