¿Por qué se frotan los gatos en las personas? Por cariño y para quedar impregnados del olor de las personas.
En muchos de sus frotamientos, sea en personas, objetos u otros gatos, ellos están en realidad comunicándose. Los felinos poseen glándulas en la región de la cabeza, alrededor de los labios, en las patas y en los laterales del cuerpo que secretan feromonas, que actúan como una especie de ‘comunicadores químicos’.
Las feromonas son únicas, como nuestra huella digital, cada gato tiene la suya. Las glándulas de la cara secretan sustancias con efecto calmante para ellos. Si se frotan, el gato libera secreciones de esas glándulas y deja su olor impregnado en la persona u objeto, marcándolo como su territorio. Esta secreción es limpia e indetectable al olfato humano. Es una forma del gato demostrar que aquel lugar, objeto, animal o persona es de su posesión. Y tú pensando que eras su dueño…
El siguiente gato en pasar por el lugar probablemente se detendrá, olerá e identificará si el olor es de un gato conocido, cuándo estuvo ese gato por allí, en qué dirección estaba e incluso percibir si estaba de buen humor.
El gato también puede frotarse en animales más grandes y más fuertes como un acto amable, pero no de sumisión. Cuando se frota en su dueño, el gato normalmente quiere pedir algo como comida o pretendiendo que el dueño lo siga. Cuando los gatos restriegan sus cabezas una contra la otra, es señal de que están cómodos y reforzando que son del mismo grupo.
Las hembras también tienden a frotarse en los machos que desean, especialmente en la época del celo, para demostrar receptividad para el apareamiento.
Video
http://youtu.be/-LxAELc6-HU
