En el momento de blanquear la ropa tenemos la química presente a través de la reacción de reducción. Los blanqueadores son agentes oxidantes, es decir, provocan la reducción de compuestos. El hipoclorito de sodio (NaClO), por ejemplo, presente en los tipos más comunes, se obtiene mediante la siguiente ecuación:
2 NaOH (aq) + Cl2 (g) → NaOCl (aq) + H2O (l)
Los blanqueadores más modernos tienen en la composición el perborato de sodio (PBS), esta fórmula ataca el tejido, es decir, limpia suavemente la ropa sin dañarla. Este tipo de cloro permite decolorar la tela manteniendo intacta su composición textil. Durante el lavado sucede la formación de peróxido de hidrógeno, veamos la reacción:
2 H2O2 → 2 H2O (l) + O2 (g)
Tengamos en cuenta que el peróxido de hidrógeno (H2O2) se descompone en gas de oxígeno (O2) durante el proceso. Por lo tanto, decimos que la reacción es de reducción, porque un compuesto fue reducido a otro.