En la historia, muchos de sus fuentes no son codificadas por textos antiguos. Recientemente, nuevos estudios buscan comprender las transformaciones del pasado a través de documentos que manejan su propia narrativa, con el uso de los edificios, objetos e imagenes que hasta hace poco entendida como “accesorias” en los estudios historiográficos. En este sentido, podemos ver las posibilidades en este campo de investigación que ahora permite analizar la arquitectura medieval.
Sin duda, los edificios que aparecen entre los siglos V y XV, tiene una capacidad rica para expresar y guiar al rango dinámico con experiencia en este milenio. Hemos hecho un análisis comparativo útil que trabaja los trazos de la arquitectura medieval que puede organizarse en Alta Edad Media y Baja Edad Media. Además, reafirmando la fuerte cultura religiosa desarrollada durante este tiempo, estamos a favor del cumplimiento de las iglesias construidas en este momento.
Durante la Edad Media, los edificios se componen de paredes gruesas y masivas que reflejan toda la inseguridad causada por las guerras y las invasiones que tuvieron lugar en Europa. La Iglesia tuvo una decoración mínima dominada por líneas horizontales. Además, los edificios tenían pocas ventanas, por lo general producida por arcos de medio punto. Por lo general, esta datación es conocida como románica y este tipo de construcción fue predominante en Europa hasta el siglo XII.
Después de este período, vemos que la arquitectura medieval quiso experimentar nuevas perspectivas dentro del contexto del renacimiento comercial. El estilo llamado gótico comenzó a ser formulado en las iglesias que se establecieron en los recién formados centros urbanos europeos. El aspecto de la construcción era más ligero con el uso de grandes ventanales y paredes tachonadas con vidrieras multicolores.
La ornamentación y decoración tenía un mayor número de detalles que indican la presencia de los nuevos descubrimientos arquitectónicos. La escala de estos nuevos edificios era mucho más grande y tenía un mayor número de torres en el mismo edificio. El detalle ornamental visto claramente indicaba un exquisito diseño estético, que no se puede imaginar sin los materiales y piedras preciosas traídas por las nuevas rutas comerciales que se ponen en contacto con Europa del Este.
En muchas pruebas, podemos ver la preocupación en la evaluación de estos dos estilos arquitectónicos como símbolos de la naturaleza contrapuesta. Sin embargo, tanto en la arquitectura románica como en la arquitectura gótica, encontramos que los valores religiosos fuertes se reafirman. Sería un gran error de interpretar simplemente las transformaciones entre la Alta Edad Media y la Baja Edad Media como un movimiento delimitado a las rupturas.
Por un lado, el románico se reafirmó con la religión cristiana, mediante la explotación de los espacios con poca iluminación y cerrada, lo que refuerza la necesidad de la meditación espiritual en tiempos de incertidumbres. Por otro lado, los edificios, a pesar de todo su colorido y animado ornamento, también reafirmaron la religiosidad de la época con el uso de arcos de medio punto que marcó el punto más alto del edificio hacia el cielo. Además, la gran envergadura de los edificios demostraba la inferioridad del hombre frente a la superioridad de Dios.
